domingo, 8 de noviembre de 2015

Cosas que a veces hago ebrio #1: Escuchar música.

Puta la weá le queda 20% de bateria a mi iPod, voy a tener que cargarlo la semana que viene.

      Porque no todo en la vida son cosas malas, y aunque me gustaría, no me puedo quejar de absolutamente todo, a veces a la gente buena como yo, nos pasan cosas buenas, esta semana (en verdad un día de esta semana) fue una de ella, encontré mi iPod, al que daba por perdido hace dos años. Y como Apple es una marca confiable, de la que nunca he dudado su relación precio/calidad, todavía funciona como si lo hubiera comprado ayer (obviamente no pude actualizar la weá de iOS porque puta, es Apple, y como tiene más de un año ya no hay soporte, tienes bien merecido estar quemándote en el infierno Jobs, bien merecido).

          Entonces, como hace más de un mes que no actualizo esto (octubre se pasó volando, como los momentos de felicidad en mi vida), les traigo (sí, a ustedes les hablo, dos seguidores) una lista de canciones que suelo escuchar cuando mi estado etílico me impide manejar cualquier tipo de maquinaria pesada.

       Siempre he pensado que la vida se resume en la contradicción aristotélica de que el que la hizo curao la quiso hacer sobrio, y que curado no vale, que se aplica en todo, la música no es la excepción. Y creo que saca una lado político/social/emocional que ni yo sabía que tenía.


My motto.


      - Sui Generis: Cuando llego a mi casa, sin sueño, pero lo suficientemente poco útil como para cuestionar absolutamente todo lo que sucede en mi vida, me nace el amor por Charly Garcia y me pongo a escuchar Sui Generis (esta weá es generalmente después de una escena en la que me pongo a hablar con Dios y le preguntó, "amigo, qué onda?" mientras me como una pascualina, eso es vida),a demás que el tono de Charly en ciertas canciones me consuela sabiendo que la caña del otro día no es la peor weá que me podría pasar en el mundo.



"Y descubrís que amor es más que una noche y juntos el amanecer. Poco a poco vos te conformás, si no es amor, es tuya igual, y vos le das lo que te pida" Ya si en verdad no sé por qué no escucho esta cosa sobrio más seguido, es terrible buena. 


         - Johnny Cash: El único momento en que escucho a Cash en mi vida, es justamente cuando no me queda (juego de palabras, un día lo van a entender y se van a reír).





       En verdad la única razón por la que escucho esta canción es para decir "thought i was her daddy but she had five more"  con ese sentimiento que solo la falta de equilibrio puede darte.



         Jesucristo Super Estrella:  No pregunten. No sé. Pero sucede. Y me gusta.



No me avergüenza mi capacidad de hacer un one-man-show con esta escena. Sobrio. Soy el mejor Judas que van a ver en sus vidas, herodes, no tanto. Tú mientes, tú, negro (8). Fuera de webeo, este musical es una obra maestra, y si le hace al inglés las versiones de Camilo Sesto son bien buenas fíjese, algo que no digo muy seguido de Camilo Sesto.


        Marron 5:  Como decía mi abuelo, el vino en jarro cura el catarro, y no, no estoy llorando, tengo los ojos irritados porque estoy resfriado. La verdad no tiene mucho que ver, pero como todo en esta entrada, no tengo una buena explicación.



Oye vuelve, te amo.



    Las pastillas del abuelo:  Ya, este la escucho a cada rato en verdad, si es uno de mis grupos favoritos, peero, hay una canción en partículas, que solo escucho ebrio, de noche, con un vaso en una mano, un cigarro en la otra y una sensación de paz que solamente los viernes en la noche saben darme.



Aunque la realidad es que la escucho para poder decir "Cuando me acuerdo de ella, levanto mi vaso y brindo a donde quiero que esté", si lo digo sin un vaso es súper flaite. 


OH, Y ESTA TAMBIÉN. Creo que todos nos podemos sentir un poquito con la historia que cuenta, unos más, otros menos.


"Quiso el destino que esa noche hiciera, y que el ruido de los coches me hiciera hablarte al oído, y si el diablo se contenta con que dudes un instante, vos y yo, nuestras miserias, y esta noche por delante amor..."
    

Hay más canciones, pero estas son las que se repiten, una una y otra vez. y me gusta. Aunque tampoco hay que pasarse de la raya, una vez lo hice, y bueno.


 Fue el mejor 18 que he vivido, así que no importa, pero si beba no conduzca, ni mande mensajes, ni cante muy fuerte, por favor.  Igual puntitos a pato ebrio por intentar poner los tildes.





PD: Ya, quería hacerme el weón, pero a veces me acuerdo de mi abuelo, y me da penita, y me pongo a escuchar tango, y no importa, no me arrepiento de nada.





"Hoy resulta que es lo mismo ser derecho que traidor, ignorante, sabio, chorro, pretencioso, estafador, todo es igual, nada es mejor, lo mismo un burro que un gran profesor..."